Por un lado el insistente tran tran que pone a José María Aznar, harto de que le hagan la cama entre Pedrojota y Losantos, abanderando esa opción de un "prisa de la derecha". En palabras de Marcello:
El Mundo, del que se dice que sus dueños los italianos de Il Corriere ahora lo quieren vender, y puede que se lo estén ofreciendo al magnate australiano Rupert Murdoch, del que es consejero, ¡oh casualidad!, José María Aznar.
Cuenta Manuel R. Ortega en El Semanal Digital:
El chau-chau del verano, sin embargo, corresponde a Pedrojota. En El Mundo, donde ya se ha hecho efectiva la rebaja del diez por ciento de salario, y fuera de él se oye, se escucha, se comenta que el periodista más poderoso de España estaría buscando comprador para su paquete accionarial en el rotativo de Unidad Editorial. ¿Será cierto? ¿Es imaginable un Pedrojota retirado a su casa de Mallorca para escribir libros de historia, que es lo que, según él, le gustaría hacer al dejar el Periodismo?
Porque optar por el amarillismo es una opción personal de Pedrojota y al agotar el modelo sin resultados periodísticos (económicos ha dado muchos, pero en el pasado), la posibilidad de sumar a las multas (100 mil y 35 mil ha pagado Losantos, tiene pendiente otra de 74 mil, más las de COPE, y 200 mil le piden a El Mundo de momento) el descrédito absoluto está provocando serios movimientos:
Sábado 5 de julio. Consejo de Administración en Unidad Editorial. Pedrojota y Antonio Galiano medirán sus fuerzas. Tal y como venimos anunciando, planea sobre sus cabezas un ERE de al menos 90 empleados, según fuentes oficiales, aunque otras hablan de al menos 300. Todo el mundo calla, excepto los trabajadores. Casi todos los áreas de negocio tiemblan, y mucho más tras conocer los últimos resultados de EGM en las que su buque insignia ha perdido 40.000 lectores.
El caso es que Unidad Editorial no va bien y lo que es peor: sus dueños italianos van peor.
La conspiranoia, que tanto ha beneficiado al gobierno de Zapatero, ayudando a su reelección, se ha convertido en una operación de acoso y derribo contra Rajoy. La novedad es que Mariano Rajoy les ha salido respondón ("implacable", dice Zarzalejos) y los cantos de sirena de Aznar o los tejemanejes de Aguirre no acaban de achantar al gallego:
operación de corte político y conspiratorio encaminadas a utilizar el 'caso Gürtel' para ver si consiguen debilitar o derribar a Rajoy. Una operación en la que varios de los dirigentes del PP llevan años empeñados, y de manera especial el diario El Mundo y su altavoz radiofónico de la COPE, los mismos que insultaron y pidieron la dimisión de Rajoy hasta la saciedad.
Campañas como la emprendida por El País y El Mundo, juntos en esto de hacer la ola a Zapatero, no han podido derribar a Rajoy. Si el gobierno cambia como si no, hay que seguir apretando la teta de las subvenciones y la publicidad institucional. Con Rajoy en contra y sabiendo que Zapatero puede darles la patada en cualquier momento (Roma nunca pagó traidores), solo queda la carta de seguir animando a barones regionales y recibir, al menos, dádivas de las distintas taifas:
Ahora estos medios le piden a Rajoy el cese de Bárcenas y al Tribunal de Valencia el "indulto" de Camps, pero con un matiz: porque parecen haber pactado con el presidente valenciano su dimisión irrevocable, en caso de que Camps deba sentarse en el banquillo del juicio con jurado como se lo pide el juez instructor de su presunto cohecho por el regalo de unos trajes. Un extraño pacto al que parece haberse prestado Camps -concretamente con el director del diario El Mundo- un tanto a la ligera, y que no gusta en la dirección nacional del PP.
Pero no basta con arreglos políticos, además hay que vender:
Fuentes citadas por el diario explican que:
una delegación de The Times, encabezada por su nuevo director, vino a Madrid hace un par de meses o tres para conocer El Mundo y al propio Pedro J. Eran 4 ó 5 personas, que estuvieron aquí un par de días, y con quienes se habló de todo, fundamentalmente de Internet, porque el problema que ahora preocupa a todos los grandes diarios es cómo rentabilizar la edición online, en nuestro caso Elmundo.es.
Y los españoles devolvieron la visita a Londres. “En la delegación de El Mundo, encabezada por Pedrojota, figuró Luis Enríquez (director gerente), Iñaki Gil (director adjunto), Juancho Cruz (Infografía), Koro Castellano (Internet) y el corresponsal en la capital británica. Todos mantuvieron una jornada de trabajo completa en la sede de The Times, y de nuevo el tema estrella volvió a ser La Red y sus misterios, o cómo sacar partida económico a las webs del grupo”.
Lo más interesante fue que a mediodía, el magnate australiano y Pedrojota se fueron a almorzar por su cuenta y al margen del resto de la delegación española. Las fuentes, cercanas a la banca de negocios, apuntan a que Ramírez podría estar negociando una joint venture con Murdoch que terminaría en un intercambio accionarial. “Han quedado en seguir hablando en septiembre. El interés de Pedrojota es evitar que los italianos puedan vender a quien no le convenga a él personalmente”. En el diario madrileño, sin embargo, niegan la mayor: “No es cierto que quieran vender; muy al contrario, están absolutamente entregados al periódico”.
El Prnoticias aclaran algunas cifras:
Durante el primer trimestre de 2008 RCS -editor de Unidad Editorial- perdió 18,6 millones de euros en comparación a igual periodo del año anterior, y lo que es peor: sus acciones han caído en picado durante el último año (los datos indican que desde el pasado 4 de abril ha perdido un 34% de su valor bursátil y un 48% en los últimos seis meses).
2 comentarios:
Es curioso, pero al escuchar a Iñaki Gabilondo y a ZP aquella mañana negra del 11-M, se ve claramente que todos sus esfuerzos se centraban en que las fuerzas políticas mandaran un mensaje de tran-qui-li-dad y u-ni-dad para que las cosas no se desmandaran. Claro, creían que había sido ETA y cualquier estridencia podría ayudar al PP en el proceso electoral. Que nadie osara utilizar el atentado en campaña elctoral...
Luego las cosas cambiaron y se pusieron al frente de la manifestación, dicidiendo, confrontando y atacando al Gobierno. Claro, creían que había sido Al-Qaeda y entonces les interesaba crear división en la opinión pública.
Muy agudo, anonimo.
Publicar un comentario