El policía Rodolfo Ruiz, allí sentado, fue presa del llanto ante las duras palabras del periodista y escritor. Sin vaselina, que se dice, Díaz Herrera comienza el libro con el caso del policía al que el diario El Mundo acusó de colocar la famosa mochila-bomba tras los atentados del 11-M para falsificar pruebas.
Sin pizca de compasión, argumentó a todos los allí reunidos que Pedrojota Ramírez no tiene ni una sola prueba para sostener esa acusación y, muy duro, aseguró que la esposa de Ruiz, Macarena, se suicidó el año pasado porque no pudo soportar la presión, para concluir que Ramírez publica "asuntos de los que no tiene ni puñetera idea causando muertos a su alrededor". De ahí que durante el acto se refiriera varias veces al "periodismo endemoniado de este hombre". A nadie le pareció raro que el policía no pudiera contener las lágrimas: "Perdona Rodolfo, que te estoy haciendo llorar", le animó Díaz.
El comisario Rodolfo Ruiz está pendiente del juicio en su querella contra Federico Jiménez Losantos y la cadena COPE por delitos de injurias y calumnias . El ex-locutor de la COPE y Pedro J. acusaron a Rodolfo Ruiz de "sembrar de pruebas falsas el sumario" y de "colaborar en una masacre criminal", asegurando que lo meterían en prisión. Cuando Losantos declaró ante el juez lo negó, amparándose en que entonces existían "dudas" y, en su opinión, "no hay declaraciones injuriosas".
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